5- Vida fácil - Parte 3
Por primera vez en mucho tiempo Jessi no sabía qué hacer, no se le ocurría manera alguna de salir de esta situación. La desesperación lo condujo a querer entrar en la casa, quizá habían dejado las píldoras o, en su defecto, alguna se debió a ver caído por ahí, con solo una bastaba para que volviese a ser un hombre. Este plan fue inútil, ya que la policía obviamente le prohibió la entrada a la señorita. Jessi no tuvo más opción que volver a casa e idear un nuevo plan con la cabeza fría. Nuevamente tomó un taxi y en el camino pensó en como todos sus planes se habían ido al tacho. Si hubiera obtenido la píldora, al llegar a su casa sería nuevamente un hombre, esta vez para siempre, pues sentía que transformarse tantas veces en Jessica afectó su mente, provocando que haga cosas que él no quería, como tener sexo con un hombre. Luego con todo el dinero que había obtenido se dedicaría a mejorar su vida, por ejemplo, quería entrar a un gimnasio para mejorar su descuidado físico. Así mismo, utilizaría el dinero para postular a una de las mejores universidades del país, esto es debido a que quería ser como Edinsson y quería dejar de estafar a las personas.
Mientras pensaba en esto bajo su mirada viendo los senos que ahora colgaban de su pecho, demostrándole que ahora no queda nada masculino en él. Esto lo llenó de impotencia lo cual, sumado a que las nuevas hormonas que su cuerpo producía, hizo que Jessi comience a llorar. El taxi llegó a su destino, la hermosa joven con los ojos llorosos, pagó y se fue rápidamente a su casa. Ahí su madre y su hermana lo esperaban, Jessi entro y abrazó a ambas, estas automáticamente entendieron que algo salió mal. Jessi les contó la situación, su madre no pudo evitar sentirse culpable, pues ella botó la última píldora, sin embargo, Jessi la consoló diciendo que él solo se metió en esto. Su madre abrazó a la hermosa joven diciéndole que sin importar lo que tenga entre las piernas, ella siempre lo amará. A su vez, Claudia le dijo que lo ayudaría a encontrar una manera de conseguir otra píldora y que por mientras tendrá su apoyo para aprender a ser una chica.
Esto calmó un poco a Jessi pero aún no aceptaba la idea de ser una mujer para siempre, por lo que se encerró en su cuarto, su madre y su hermana decidieron dejarlo a solas para que pueda asimilarlo y calmarse. Se puso ropa cómoda que Claudia le estaba prestando y se tiró a su cama, decidió revisar su nuevo celular a ver si así podía despegar su mente un rato. Al encenderlo vio en las notificaciones que tenía muchas llamadas perdidas de Edinson y muchos mensajes del mismo. Jessi mantenía su idea de alejarse de ese hombre, pues tenía miedo de repetir lo de la otra noche, así que decidió ignorarlo apagando su celular. Jessi sentía que estaba pagando todo el mal que había causado mintiendo y estafando y no pudo evitar soltar un gran grito de la rabia.
Claudia al escuchar a Jessi gritar con su voz femenina, se sintió mal por su hermano ahora hermana. Aunque sabía que en parte se lo merecía, ella quería ayudarlo a enfrentar a esta situación. Entró a su habitación y se sentó en la cama, Jessi nuevamente entre lagrimas apoyó su cabeza en las piernas de su hermana buscando consuelo.
Jessi: Este maldito cuerpo me hace ser un llorón, lo odio.
Claudia: Bueno al menos eso demuestra que el malvado Jessi tiene sentimientos - Dijo con la intención de animar un poco a su hermano-
Jessi: Eres una idiota -dijo soltando una pequeña risa - ¿Qué haré ahora? - volvió a su tono melancólico-
Claudia: Pues todo lo que nos dijiste ayer, sé que no es fácil ser un hombre por 19 años y ahora ser del sexo opuesto pero si lo miras de cierto modo, no te falta una pierna, ni un brazo, lo que quiero decir es que ser una mujer no es un impedimento para que hagas todo lo que querías.
Jessi no pudo contradecir a su hermana, porque tenía razón en todo lo que dijo.
Las palabras de Claudia hicieron reflexionar a Jessi, era cierto aún podía empezar de nuevo de su vida y corregir todos sus errores, solo que ahora tenía que acostumbrarse a ser una mujer muy linda, lo cual no era malo del todo, ya que había disfrutado ser una mujer esos días que tomó las píldoras. Se animó y se limpió las lagrimas, para luego abrazar a su hermana diciéndole que la quiere. Jessi como hombre jamás le había dicho algo parecido a Claudia, por lo que ella se sorprendió, abrazando a Jessi mucho más fuerte.
Claudia: Entonces, ¿ahora cual es el plan?
Jessi o ahora Jessica solo sonrió.
Jessi decidió abrazar su feminidad por completo, dejando a Jessica completamente libre. En este proceso Claudia fue de vital importancia, pues le enseñó a Jessica todo lo que ser una mujer implica. Primero le enseñó a cuidar su cuerpo, le mostró las cremas y jabones que debía utilizar si que es que quería mantener su suave piel, lo mismo con el cabello. Para Jessica fue demasiado en un principio, pues estaba acostumbrada a usar solo un jabón y un solo champú para asearse, pero con el pasar de los días esto solo era parte de la rutina para verse bien. De la misma forma, la apoyó y le enseño a usar tampones cuando le llegó su primera menstruación. Claudia también inscribió a Jessica en el mismo gimnasio al que ella iba, pues le hacía ilusión ir junto con su nueva hermanita. Jessica, cuando era hombre, no era de hacer ejercicio ni deporte por lo que los primeros días de entrenamiento acaba muerta. Igualmente, ambas hermanas fueron a comprar ropa femenina, para renovar el guardarropa de Jessica ya que toda la ropa de hombre que había ahí ya no servía para nada. Gastaron una buena parte del dinero que Jessica había logrado obtener pero a cambio Jessica compró muchos vestido, zapatos, shorts, ropa interior, jeans, etc. A diferencia de Jessi al que nunca le importó mucho su apariencia, Jessica ponía mucho esmero en verse bonita y, por qué no, por verse sensual.
Jessica le daba la espalda, no se había percatado de que él estaba ahí. Edinsson dudo un minuto, pero tenía que saber porque Jessica se había alejado de él, si ella le decía que no quería verlo, lo aceptaría, pero solo quería saber qué hizo mal. Se acerco y con su grave voz dijo su nombre - Jessica-, la mujer, de inmediato, identifico esa voz que hasta ahora sigue erizando su piel y volteo a ver el origen de esta. Después de regular tiempo, por fin ambos cara a cara, Jessica estaba nerviosa pero sabía que tarde o temprano tendría que darle una explicación a Edinsson. Les dijo a sus amigas que avanzarán, ella al rato les daría alcance, quedándose a solas con el hombre. Nuevamente ambos quedaron callados viéndose frente a frente, Jessica quería inventar una nueva mentira para justificar el alejarse de Edinsson, pero no quería mentir más, mentir le llevó a esto así que lo decidió, le diría la verdad.
Jessica dijo toda la verdad, sin dejar ningún detalle suelto, le contó que ella era un hombre que tomaba unas píldoras que lo transformaban en una mujer, así se aprovechaba de hombres como él, pero que de tantas citas a su lado, ella se había encariñado con él y ahora le pedía perdón por todo eso, finalizó diciendo que entendía si no quería verla nunca más. La cara de Edinsson reflejaba su sorpresa e indignación, en un principio creyó que lo que decía la mujer era una broma o que se estaba una excusa para no verlo más, pero sus ojos no parecían mentir y en su bello rostros se reflejaba su arrepentimiento. Era mucha información para Edinsson, tanta que solo se despidió de Jessica y se fue, ella pensó que ahora la odiaba y se fue triste con sus amigas, pensando que ahora en definitiva, no sabría más de él. Edinsson pensó toda la noche, se sentía molesto por el engaño, sabía que varias mujeres podrían aprovecharse de su fortuna y no le importaba, pero pensaba que Jessica era distinta. Y lo peor tuvo relaciones con técnicamente un hombre. Eran buena razones para no volver a hablarle pero a pesar de que ella era un hombre y a pesar que lo engañó, Jessica le hizo sentir algo que ninguna mujer pudo.
Jessica se encontraba en su habitación, poniéndose ya su pijama algo desaminada por el encuentro de hoy, en eso recibe un mensaje de Edinsson diciendo que la vería en el parque. Jessica se emocionó pensando que Edinsson había decido perdonarla y eso la dejaría tranquila. Al día siguiente antes de la cita Jessica se arregló con mucho entusiasmo, recordando la primera vez que se maquilló, exactamente para ver al mismo hombre. Se puso un hermoso vestido que resaltaba su figura y unos tacones que estilizaban aún más sus piernas. Ya arreglada llegó al parque y como la primera vez, espero a la llegada de Edinsson muy nerviosa.
Luego de la gran sesión de sexo, ambos decidieron ir con calma. Tuvieron varias citas en las que el uno se fue enamorando del otro. Hasta que llegó el día que Edinsson le pidió a Jessica que sea su novia, a lo que sin dudar Jessica aceptó. La bella mujer le presentó su novio a su familia, Claudia quedó encantada con el sujeto, pues Jessica siempre le contaba como él la trataba y era todo lo que esperaba. En cuanto su madre le chocó la idea de que su hija sea novia de alguien mucho mayor, pero al verla feliz no pudo oponerse, hasta que se acostumbró. A pesar de que Edinsson seguía llenando de regalos a Jessica, ella también quería ganarse las cosas por su propio esfuerzo, por lo que se esforzaba estudiando en la universidad. Sin duda hay un gran contraste entre el Jessi que tomó la píldora por primera vez y la Jessica actual.
Me encantó, las 3 partes fueron perfectas, muchas gracias, la espera valió la pena, realmente es un gran trabajo y se volvió una de mis historias favoritas ❤️
ResponderEliminarMe alegra mucho, porque esa historia es para ti <3. Ya tengo mi petición, Luis es un padre de familia muy estricto, pero por un motivo x ( te lo dejo a tu creatividad) se convierte en una sexy adolescente de la edad de su hijo (19 años), termina enamorándose de su hijo, teniendo relaciones con él y volviéndose su novia.
EliminarClaro hazla cuando tengas tiempo, estaré esperando.
Claro con mucho gusto la haré, espero te guste y pueda pagarte esta gran historia que isiste para mí ❤️
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